viernes, 11 de septiembre de 2009

crisis significa oportunidad
oprotunidad de entrar en crisis.
ante la oportunidad...¡entre en crisis!
ante la crisis...¡entre en crisis!
No seas inoportuna, Luciana! ¿Como vas a estar en crisis?
No ves que le sacas la oportunidad a otros!
Como un lazo transparente que te une de por vida

Mirá que intenté repararlo, con la gotita, con cinta scoch, con todo.
Pero no dio resultado. ¿Viste?
Entonces dije..."Ya fue, a la mierda con el lazo"
Lo intenté romper, pero el hijo de puta se volvia a unir como si fueran dos imanes.
¡Si seras hija de puta vida!
Todos los finales son promesas de nuevos comienzos.

Che, ¿Cuando comienza lo nuevo?
Estamos presos de nuestra única manera de ver las cosas. Nada es ni blanco, ni negro, todo depende…

Sin embargo, pareciera que siempre las cosas son como uno dice.
Como yo digo.
Y aunque intente declinar, bajar la guardia y escuchar...
Soy rencorosa, y me cuesta haberlo descubierto.
Preferiria no haberlo hecho.
No poder perdonar del todo es horrible.
Estar entre el "todo bien" y el "todo mal"
Reirse, hablar, comer... pero saber que no vas a poder hablar seriamente porque tu rencor no te permite volver a confiar.
Ni que se tratara de una puta novela.
Porque en las novelas, al final se vuelve a confiar, a creer y el del error se arrepiente, y pide perdón.
Y todos lloran de felicidad y emoción y son felices.
Y cantan canciones al estilo Cris.

Es increible como todo lo llevo para el mismo lado, para Cris y aquello otro.
En fin...

jueves, 3 de septiembre de 2009

Qué es la suerte?
Todos tenemos suerte? O sólo algunos?
De qué depende la suerte? Se busca? Viene sola? La atraemos? Nacemos con suerte?Las chicas sin suerte siempre somos espectadoras, nunca protagonistas. Pero ser espectador o protagonista depende solo de una decisión.
A las chicas sin suerte nunca nos dan un protagónico, siempre somos nosotras las que tenemos que ir, pararnos en el centro del escenario, debajo de la luz, y decir “acá estoy”.
Las chicas sin suerte vivimos lamentándonos por lo que nos tocó en suerte. Pero cuando nos revelamos, cuando agarramos el toro por las astas, algo empieza a cambiar.
Lac chicas sin suerte creemos que somos como una balsa en el mar, a la deriva. Pero podemos nadar, podemos patalear, remar… está bien, tenemos que remar mucho, sí, pero remado llegamos a donde nosotros queremos, no a donde el mar nos lleva. Ya no necesitamos la suerte, porque la suerte la hacemos nosotras.
Las chicas sin suerte nunca somos amadas. Y como no somos amadas las chicas sin suerte tenemos que hacer algo para que nos amen.
Para las chicas sin suerte ser amadas es un trabajo, un esfuerzo.
La suerte de la fea la linda la desea. Pero la fea no tiene suerte, tiene actitud, ella sabe hacer su propia suerte.
Porque es así, los que no tenemos suerte tenemos que ser prepotentes, estirar la mano y agarrar lo que la vida nos mezquina.